En un mundo donde la preocupación por el bienestar de la comunidad y lo sostenible está de moda, es común que se utilicen términos que pueden llegar a generar confusión por su aparente similitud.
Es el caso de estas cuatro palabras: sostenibilidad, sustentabilidad, ecología y ecologismo. Veamos en qué se diferencian.
Sostenibilidad
Con un enfoque general, podríamos definir la sostenibilidad y los procesos sostenibles, como aquellos que nos permitan satisfacer las necesidades de las sociedades actuales, sin comprometer que las próximas generaciones puedan también cubrir sus necesidades futuras. Esto, obligatoriamente nos lleva a tener que considerar:
- El desarrollo social- Cubrir las necesidades sociales supone garantizar un Estado de Bienestar; una cobertura básica de las necesidades primarias de las personas, como es la lucha contra la discriminación, la conciliación laboral y familiar, la disponibilidad de salarios dignos y una buena calidad de vida. Lograrlo implica establecer políticas que ayuden al desarrollo de la sociedad en su conjunto.
- El desarrollo económico- Suplir las necesidades económicas implica garantizar la rentabilidad empresarial utilizando prácticas responsables en la organización. Ahora bien, ¿Qué medidas debemos implementar para lograr la sostenibilidad económica? Entre las posibles opciones, podemos realizar proyectos de eficiencia energética renovable, establecer una economía circular o incluso nuevas tendencias cómo la adición de microagricultura para abastecer negocios de hostelería y otros servicios.
- Desarrollo medioambiental- Cuando nos referimos al desarrollo de nuestro medio ambiente, hablamos de cómo gestionar y usar los recursos naturales de manera que puedan regenerarse y no se degraden a largo plazo. Esto significa que debemos implementar medidas y políticas que aseguren la conservación de los ecosistemas, la biodiversidad y el equilibrio ecológico. De esta manera, las futuras generaciones podrán disfrutar de un entorno saludable y contar con recursos suficientes para sus necesidades.
Por lo tanto, para usar correctamente la palabra sostenibilidad deberemos conseguir el equilibrio entre los tres ámbitos ASG: medioambiental, socio-cultural y de gobernanza y economía.
Sustentabilidad
Como comentábamos, la sostenibilidad necesariamente requiere un compromiso social, económico y ambiental. Sin embargo, la sustentabilidad no cumple con esta definición. ¿Te imaginas el por qué? Si bien a menudo se usan indistintamente, sostenibilidad y sustentabilidad no son sinónimos exactos.
Basándonos en la propia definición del término “sustentable”, éste debería utilizarse para indicar que algo “se puede sustentar o defender con razones.” En otras palabras y orientándose al concepto de “desarrollo sustentable”, hablamos de llevar a cabo un tipo de desarrollo y progreso que salvaguarde y haga un uso razonable de los recursos.
En resumen, mientras la sostenibilidad abarca un enfoque más amplio y holístico, la sustentabilidad se enfoca principalmente en la gestión y conservación de los recursos disponibles en el entorno.
Ecología: la ciencia de los organismos y su entorno
¿Sabías que las palabras "economía" y "ecología" tienen mucho en común? En efecto, ambos términos están estrechamente relacionados y resulta imposible definir la ecología sin considerar la economía.
Todo comenzó en 1866, cuando el destacado biólogo alemán Ernst Haeckel, en su libro “Generelle Morphologie der Organismen”, utilizó por primera vez el término "ecología". De su definición, hay un aspecto que a menudo se olvida al analizar la etimología de "ecología": Haeckel entendía el prefijo "eco-" (del griego "oîkos" οἶκος, que traducido es 'casa') como 'economía de la naturaleza' y no como 'medio ambiente', contrariamente a lo que comúnmente se explica.
Para que podamos entender el origen de la palabra "ecología", primero debemos analizar "economía". En griego, "oikonomía" significaba 'administración de la casa'. No fue hasta el siglo XVII que adquirió una definición más amplia, refiriéndose a la 'administración de los recursos de una comunidad'.
Ecologismo: el movimiento que protege el medio ambiente
El ecologismo y la ecología, aunque relacionados, son conceptos distintos que a menudo se confunden. La ecología es una disciplina científica que estudia las interacciones entre los organismos y su entorno. Se centra en comprender cómo los seres vivos, incluidos los humanos, coexisten y se afectan mutuamente dentro de los ecosistemas. Los ecólogos investigan procesos como la cadena alimentaria, los ciclos de nutrientes y las dinámicas de población para revelar los mecanismos que sustentan la vida en la Tierra.
Por otro lado, el ecologismo es un movimiento social y político que busca proteger el medio ambiente de las actividades humanas perjudiciales. Los ecologistas abogan por políticas y prácticas que promuevan la sostenibilidad y la conservación de los recursos naturales.
Si bien la ecología proporciona el conocimiento científico necesario para entender los problemas ambientales, el ecologismo utiliza esta información para impulsar el cambio y fomentar un desarrollo que sea respetuoso con el planeta. En esencia, la ecología nos enseña sobre el mundo natural, mientras que el ecologismo busca preservar y mejorar ese mundo para las generaciones futuras.
¿Y tú? ¿Conocías realmente el significado de estas palabras?
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