¿Qué son las doggy bags y cuál es su origen?
Las doggy bags son una excelente opción para no tirar los restos que nos dejamos en los restaurantes. Durante la segunda guerra mundial, la escasez de alimentos en Estados Unidos hizo que se implementasen prácticas para reducir el desperdicio de comida. Muchos restaurantes optaron por ofrecer a los clientes bolsas de papel para que se llevaran las sobras a casa y pudieran así alimentar a sus mascotas. Con el tiempo, estas doggy bags se generalizaron en el país y los clientes empezaron a utilizarlas para consumir ellos mismos las sobras en casa.
Hoy en día, empaquetar las sobras de comida se ha convertido incluso en un arte en algunos restaurantes de Estados Unidos. Hay establecimientos en los que los camareros envuelven los restos en un papel de aluminio al que le dan forma de cisne o de caballitos de mar. Sin embargo, la costumbre de llevarse la comida del restaurante no está tan arraigada fuera de este país, y en muchos lugares se estigmatiza esta práctica.
Por ejemplo, un estudio llevado a cabo en 2018 demostró que en Nueva Zelanda solo el 5% de los clientes que se dejaba la mitad de la comida en el plato pedían que se la empaquetasen. En Corea del Sur, servir una gran cantidad de comida en los restaurantes se considera un signo de hospitalidad, pero llevarse las sobras a casa no está muy bien visto. La situación no es mucho mejor en Europa, donde a menudo a la gente le da vergüenza pedir un tupper en un restaurante.
El despilfarro de alimentos es una de las problemáticas mundiales más importantes
En el mundo se desperdicia un tercio de los alimentos que se producen. Este es un problema importante de política pública, por lo que la "producción y consumo responsable" se ha incluido dentro los 17 objetivos de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas. Por eso, en los últimos años se han lanzado múltiples campañas para promover las doggy bags fuera de Estados Unidos. Algunos países como España incluso han aprobado leyes que obligan a los restaurantes a ofrecer bolsas y cajas a los clientes para las sobras.
Dado que una gran parte del despilfarro de comida en los restaurantes se produce a nivel del consumidor, es de vital importancia que el hábito que comenzó hace décadas en Estados Unidos se extienda por todo el mundo. Pero con esto no es suficiente. Aún existen más prácticas que podemos hacer cuando vamos a comer fuera para evitar esta problemática.
¿Conoces Biosphere Sustainable?
Una opción es acudir preferiblemente a restaurantes que aplican criterios de producción y consumo responsable, que priorizan la compra de productos locales o que controlan e informan de la gestión de sus residuos. En Biosphere Sustainable puedes encontrar una lista de restaurantes comprometidos con estas causas por todo el mundo. Todas las empresas de turismo que aparecen aquí han sido certificadas por sus esfuerzos en sostenibilidad.
Un ejemplo es el restaurante Aiyanna Ibiza. Aquí los clientes pueden disfrutar de unas preciosas vistas al mar mediterráneo mientras comen en un lugar que destaca por sus buenas prácticas. Entre otras cosas, fomenta el uso de compost, recicla de forma correcta los restos de comida y planifica los menús para garantizar el desperdicio mínimo de alimentos. Además, utilizan productos de temporada de huertos locales cercanos y compran a proveedores que siguen políticas agrícolas respetuosas con los animales y el medio ambiente.
Too Good to Go
Por último, puedes formar parte de iniciativas que luchan contra el desperdicio de comida como Too Good to Go. Este es un movimiento que nació en Dinamarca en 2016 y ya cuenta con más de cinco millones de usuarios en nueve países europeos. Se trata de una aplicación gratuita que te permite conseguir comida de calidad a un precio más barato. Básicamente, compras la comida sobrante de establecimientos como restaurantes, supermercados, hoteles o fruterías, evitando que termine en la basura.
Gracias a Too Good to Go el consumidor consigue comprar a buen precio, las empresas pueden vender sus excedentes y se tira menos comida. Todos salimos ganando. Además, su funcionamiento es sencillo. Sólo hay que descargar la app, elegir un establecimiento que te guste, hacer el pedido, pagar a través de la app e ir a buscarlo en el horario establecido.