Barcelona es una ciudad comprometida con el bienestar animal, tanto de su fauna urbana como de los animales salvajes que, inevitablemente, tienen que compartir entorno con el ser humano. Esto incluye a los cetáceos, nuestros vecinos del mar.
En 2017, la ciudad celebró unas jornadas científicas sobre el delfín mular en las que participó Mariano Domingo Álvarez, patólogo veterinario de la Universidad Autónoma de Barcelona. Él lidera un grupo de investigación que contribuye a conocer la causa de la muerte de estos animales, y a formar futuros veterinarios en la patología de los mamíferos marinos.

Pregunta: ¿En qué consiste vuestro trabajo con los cetáceos?
Respuesta: Por encargo del gobierno de Cataluña, desde hace bastantes años realizamos autopsias de los cetáceos que aparecen varados en las costas de Cataluña para saber la causa de su muerte.
P: ¿Por qué el gobierno de Cataluña tiene interés en conocer la causa de estas muertes?
R: El gobierno tiene la obligación de conservar a las especies protegidas. Dentro de esta obligación está el conocer cuál es el estado de sus poblaciones y sus factores de riesgo. Esto incluye las enfermedades que les afectan y, sobre todo, los factores de tipo humano que causan la muerte de estas especies.
P: ¿Qué especies os suelen llegar?
Sobre todo el delfín listado y el delfín mular. Otra especie que es relativamente abundante aquí es el calderón gris.
P: ¿Cuáles son las principales amenazas que están encontrando?
R: En 2020, publicamos una revisión de todas las autopsias que hicimos entre 2012 y 2019. La conclusión de este trabajo fue que el principal problema son las muertes por interacciones con la pesca. Esto ocurrió en 24 animales de 89, lo que representa un 27%.
El segundo factor es la separación materna. En los cetáceos, la cría está mamando de la madre casi un año, es muy dependiente. Si la madre muere o se separan por accidente, es muy fácil que la cría muera por falta de alimento. En algunos casos podría ser que se hayan separado por causas humanas, aunque es difícil de saber.

También mueren por enfermedades como las que podemos tener los humanos.
P: Imagino que en estos animales acuáticos la transmisión de enfermedades será diferente que en los animales terrestres ¿no?
R: Sospechamos que algunos de sus virus también se transmiten por el aire. Son animales muy sociales que están en manadas y cuando respiran están cerca los unos de los otros. Yo siempre le pongo este ejemplo a mis alumnos: nosotros aquí en el aula podríamos estar transmitiéndonos la gripe. Si tuviéramos el agua hasta la cintura, seguro que nos la transmitiríamos igual.
P: ¿Los humanos podemos transmitirles enfermedades a los cetáceos?
R: No, aunque sí que hay infecciones que se transmiten desde la tierra. Por ejemplo, los delfines pueden padecer toxoplasmosis, provocada por un parásito que también infecta a humanos inmunodeprimidos o a mujeres gestantes. El principal vector de transmisión de esta enfermedad hacia el mar son las heces de gato. Cuando llegan al mar a través de los ríos, pueden infectar a los delfines por mecanismos que aún no están bien conocidos. El 9% de los delfines listados del mediterráneo están infectados subclínicamente por este parásito.
P: ¿Hasta qué punto el ser humano debe intervenir cuando se encuentra con un delfín salvaje enfermo?
R: Encontrarás diferentes opiniones. Cuando uno de estos animales se aproxima a la costa y está vivo, el Gobierno de la Generalitat tiene delegada la atención al Centro de Recuperación de Animales Marinos. Ellos hacen una valoración del estado clínico del animal y de su capacidad de supervivencia. En la mayoría de los casos la situación no es buena. Son animales que viven mar adentro y el hecho de que se aproximen a la costa ya indica un mal pronóstico. En la mayoría de estos casos se suele realizar la eutanasia.

A su estado de enfermedad hay que añadir que el animal muestra a menudo signos nerviosos. Sobre todo, el delfín listado se estresa con mucha facilidad y es muy problemático tenerlo en cautividad, tanto que no se encuentra en ningún acuario. Hay muchas dificultades para intentar rehabilitarlos.
P: Si el principal objetivo de estudiar sus enfermedades no es la de poder curarles ¿cuál es?
R: Es importante tener conocimiento de cuáles son los problemas y hasta qué punto son causados por la especie humana. Lo importante es que podamos prevenir las muertes que son nuestra responsabilidad.